CRÓNICA

¡‘PADRECITO’ CON ‘PASE VIP’ AL INFIERNO!

Riobamba/ ‘¡Lo que Dios quiera, cuando Dios quiera y como Dios quiera!’, de seguro así salía el ‘pillo santo’ encomendándose al Padre del Cielo, irrespetuosamente santiguándose para que los devotos crean en sus artimañas y, de esta manera, robar en nombre del Señor. ¡‘PADRECITO’ CON ‘PASE VIP’ AL INFIERNO!

Modus operandi. Cuando creímos haberlo visto todo, los ‘choros’ aplican su creatividad, y mejor que las estrellas de Hollywood interpretan ‘el papel de sus vidas’ y se aprovechan de los fieles creyentes para quitarles dinero sin error alguno. Así, el presunto autor de esta ‘movida’, un hombre de aproximadamente 65 a 70 años de edad, con una gran estatura y vistiendo ropa formal, por lo general llevando camisa, corbata, leva, pantalón de tela y zapatitos relucientes, muy campante transita por los diferentes sectores de la ciudad presentándose como un sacerdote delegado de la Diócesis de Riobamba, embaucando con gran verborragia para llegar a los corazones de los riobambeños. “Recolecto dinero porque pronto recibiré un reconocimiento y más tarde les otorgaré becas por su voluntad”, decía, destronándole incluso al ‘más querido’ por su ‘talento’ y gran poder de convencimiento.

Sentencia divina. ¡Ajusticiado por Dios!, pues, para ser supuestamente cura de seguro reprobó la asignatura de teología, porque se fue en contra de la Ley Suprema divulgada por el profeta Moisés, específicamente en los mandamientos II y VII: “No tomarás el nombre de Dios en vano” y “No robarás”, a esto sumándole el pecado de avaricia por ese afán desmedido de poseer riquezas. En fin, Diosito haciendo cálculos de la sentencia resume en “Mejor dejaba a los dinosaurios”…

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¡Ay, ya me exhibiste! Pero un creyente, al recibir la visita del ‘encomendado’, le abrió las puertas de su humilde morada y empezaron a charlar sobre el supuesto recorrido por la ‘Sultana de los Andes’ para reunir los fondos y realizar el evento de reconocimiento por sus obras en servicio de la comunidad, pues, para los ingenuos era un ‘alma de Dios’, incapaz de hacer algún mal en esta ‘tierra condenada’ de herejes y blasfemos, pero algo le salió mal en su singular discurso, lo que provocó la sospecha y el ‘falso sacerdote’ quedó al descubierto: ¡era un ‘choro disfrazado’!

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