Fue medallista en los Juegos Nacionales por Chimborazo
Daniela es hija única y estudia en la Unidad Educativa San Felipe Neri, en primero de bachillerato, le gusta motivar a sus compañeros para que crean en ellos antes de cada competencia, siempre les dice:
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«Ten fe que, si podemos, abrazo de grupo».
Es muy aplicada en los estudios le gusta cumplir para que los profesores le den permiso de volver a faltar.
Daniela antes de dedicarse al atletismo, le gustó la gimnasia y desde los 8 años de edad lo practicó), además le y tocar la guitarra.
La atleta riobambeña, tiene 15 años de edad, y desde hace dos años ha logrado una serie de medallas.
“Comencé hacer atletismo en los Juegos Intercolegiales, cuando tenía 9 años de edad, a partir de ese tiempo participé en las competencias y me gustó. Fernando Pérez, entrenador de Federación Deportiva de Chimborazo, me motivó a ser parte de la Selección de Chimborazo, le dijo ‘no importa si gane o pierda en los Intercolegiales, me dijo que vaya a entrenar”.
Daniela Castro.
Con los entrenamientos Daniela descubrió que tiene la capacidad para poder hacer “todo lo que me propongo y poder cumplir todas mis notas”.
La consecución de la primera medalla fue llena de alegría, “dejé de sentir la tensión que tenía porque tenía mucha presión de todas las provincias, me sentí muy aliviada al ganar la medalla”.
Daniela Castro destacó en los Juegos Nacionales Prejuveniles y de Menores, pero no se siente conforme, está comprometida en aplicarse mucho más en los entrenamientos y cumplir otros objetivos.
La prueba favorita de Daniela es los 150 metros planos.
“Mi siguiente objetivo es llegar al Campeonato Sudamericano Sub-18 y poder demostrar todo lo que he venido entrenando durante estos años”.
Daniela no solo es una excelente deportista, también es aplicada con sus estudios, claro está que no es nada fácil:
“Siempre me pongo hacer las tareas después de cada entrenamiento, lo duro es ponerse al día luego de cada competencia”.
Su familia le apoya en cuidar su alimentación, ayudarle en sus estudios, llevarle a los entrenamientos, la fisioterapia para su recuperación.
“Realmente es un trabajo en equipo, sin dejar de lado a la Federación (entrenador y autoridades)”, dijo Verónica Quisnancela, mamá de Daniela.